Ermita de las Maravillas de Abla

La Ermita de las Maravillas tiene una larga historia que se remonta a siglos atrás. Se cree que fue construida en el siglo XIV por los primeros pobladores de Abla como un lugar de culto y peregrinación. A lo largo de los años, la ermita ha sufrido varias restauraciones y ampliaciones, pero ha mantenido su encanto original y su importancia como centro espiritual para la comunidad local.

El nombre de Las Maravillas se deriva de una leyenda local que cuenta que la Virgen María se apareció en este lugar a un pastor y realizó un milagro que asombró a todos los habitantes del pueblo. Desde entonces, la ermita ha sido conocida como un lugar de peregrinación donde los fieles acuden en busca de milagros y bendiciones.