Iglesia de Santa María la Real de la Hiniesta

IGLESIA DE SANTA MARÍA LA REAL, LA HINIESTA

Esta maravillosa Iglesia declarada Bien de Interés Cultural en 1944 como Monumento Histórico, es uno de los pocos ejemplos de la arquitectura gótica en Zamora.

El edificio combina varias fases constructivas y reformas, entre el siglo XIII y el SXVIII. Los elementos más destacables son la portada y el atrio meridional: cobijada bajo un amplio pórtico con bóveda de crucería del SXV y galería de arcos ciegos con esculturas. Este pórtico fue policromado posteriormente con motivos vegetales y alusiones al Apocalipsis. El tímpano inferior representa la despedida de los Reyes Magos a Herodes y, en el superior, Cristo Juez entre San Juan y la Virgen. En la fase constructiva de 1720 fue cuando se añadió la imponenete Torre Espadaña.

El interior es asombroso, deslumbrando al entrar el retablo mayor barroco, obra de Churriguera. donde se encuentra la venerada aunque pequeña imagen (de 29 cm) de la Virgen de la Hiniesta, de finales del siglo XII. 

También llaman la atención varias esculturas góticas policromadas de los siglos XIII y XIV que se supone proceden del pórtico exterior: el Arcángel San Gabriel, la Virgen Embarazada y la Virgen con el Niño.

Horario de visitas:

Invierno (1 septiembre – 15 octubre): De viernes a domingo: 10:00 - 14:00 y 17:00 - 19:30

Del 16 octubre al 31 mayo: Cerrado: lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábados, domingos y festivos

Del 1 julio al 31 agosto: De martes a domingo: 10:00 - 14:00 y 17:00 - 20:00. Cerrado: lunes

Esta Iglesia es protagonista de una de las Romerías más tradicionales de la provincia de Zamora: la Romería de la Hiniesta, que se celebra El Lunes de Pentecostés y cuyo recorrido parte desde la Iglesia de San Antolín en Zamora capital hasta este templo.

La tradición señala como origen de la romería el hecho del traslado de la Virgen de la Hiniesta. Según la leyenda, en el siglo XIII el rey Sancho IV halló milagrosamente la imagen, siendo trasladada a Zamora, a la Iglesia de San Antolín mientras se producía la construcción de su templo, vinculando así las imágenes de ambos templos. Terminada las obras del mismo, regresaría a La Hiniesta el lunes de pascua de Pentecostés de 1291, siendo acompañada al regreso por Nuestra Señora de San Antolín, patrona de la ciudad, la cual no dejó de ir anualmente a dicha localidad en romería desde aquel año.