Iglesia de Santiago Apóstol

Su construcción se inicia en el siglo XVII, en su interior destaca el retablo del siglo XVIII y
dos lapidas funerarias situado todo ello en altar mayor, en origen las lapidas estaban a
los pies de las escaleras del altar. El templo fue restaurado recientemente, una de las
intervenciones fue picar el templo para dejar la piedra vista perdiendo así el enfoscado.
En el interior lo volvieron a enlucir dándole un acabado más cercano a la realidad que
tuvo en origen (lo que no sabemos con certeza es si en origen tenía algún tipo de
policromía ya que seguramente el enlucido dado fue el último que se le dio antes de la
restauración).
El templo interiormente se divide por un arco de medio punto en dos áreas bien
diferenciadas: 
Presbiterio: en él se sitúa el altar mayor y el retablo principal, la techumbre la
conforma una bóveda de arista realizada en ladrillo.
Nave principal: lo más destacable de la nave son sus dos arcos fajones de medio
punto los cuales dividen el espacio de la nave para formar tres bóvedas realizadas
con la misma técnica que la del presbiterio. Cabe destacar el coro alto situado a los
pies del templo y un pequeño habitáculo situado en el lienzo derecho al cual se
accede por una puerta de arco de medio punto, en su interior se encuentra la pila
bautismal.
El templo pose una imponente fachada principal la cual pose un pequeño atrio cerrado
por todos sus flancos y abierto en la parte frontal coincidiendo con la entrada al templo.
Las dos entradas son de arco de medio punto, la fachada es coronada por un frontón, la
cornisa inferior se rompe por un pequeño rosetón, toda es realizada en sillares de
granito. Adherida a la fachada en el lienzo izquierdo se sitúa la espadaña compuesta por
tres cuerpos: el inferior compuesto de sillares, el intermedio con dos vanos para la
colocación de las campanas, este cuerpo se encuentra profusamente decorado con
trabajos en la piedra y el cuerpo superior sonde se sitúa un frontón coronado con una
gran cruz flanqueada con cuatro pináculos. Los cuerpos están separados por cornisas. El
resto del edificio lo conforman cuatro contrafuertes dispuestos en los muros de la nave
central coincidiendo con los arcos fajones del interior, el presbiterio de planta cuadrada
es coronado por una cubierta a cuatro aguas, en cada esquinera se sitúa un pináculo. La
sacristía y diversas estancias de la iglesia se acomodan en el lienzo derecho del templo.