La etapa está salpicada de pequeños pueblos blancos Desde Rioja, los peregrinos se adentran en un camino rodeado de naranjos y cortijos que serpentean a lo largo del rio Andarax. A medida que el camino avanza, se encuentran con una transición gradual hacia un paisaje más montañoso, donde la vegetación cambia y el terreno se vuelve más desafiante. En Santa Fe de Mondújar, los peregrinos pueden alojarse en el albergue municipal la Posada, y si las ganas lo permiten, disfrutar de una visita al magnífico conjunto Arqueológico de Los Millares, una joya de la cultura del Bronce de toda Europa. El camino continúa en ascenso hacia el magnífico puente de Effiel y girando a la derecha nos adentramos en una zona montañosa de subidas y bajadas encadenadas. Este tramo es conocido por sus vistas espectaculares, que incluyen tanto la bahía de Almería, los subdesiertos almerienses y las cumbres nevadas de Sierra Nevada en la Alpujarra Almeriense. Antes de llegar a Alboloduy, pasaremos por Alhabia, Alsodux y Santa Cruz de Marchena donde podemos dormir en el albergue municipal Azahar. A 3 km queda Alboloduy y podemos descansar en un alojamiento privado o en el albergue municipal de peregrinos.